La financiación industrial permite a las empresas adquirir activos necesarios para expandir sus operaciones. Gracias a las inversiones en tecnología de última generación se mejora la eficiencia operativa, se reducen costes y se pueden ofrecer productos de mayor calidad.
Además, este tipo de financiación ayuda a preservar el capital de la empresa y mantener su liquidez, distribuyendo los costes de inversión en activos a largo plazo, en vez de hacer un desembolso de efectivo único. Asimismo, las empresas pueden beneficiarse de ciertas ventajas fiscales en función de la estructura de financiación empleada.
¿Cuáles son los beneficios de optar por financiación industrial?
La búsqueda de financiación es una máxima en el sector industrial. En un mundo en constante cambio tecnológico, la adquisición, mejora o expansión de activos físicos por parte de las empresas es fundamental para mantenerse actualizado y competitivo. Además, las nuevas normativas medioambientales exigen cumplir con parámetros que conllevan evolucionar a tecnologías más limpias. Es por todo esto que la búsqueda de financiación se convierte en un punto fundamental para la evolución, expansión e incluso para desarrollar mayor resiliencia ante la inestabilidad económica.
Opciones de financiación industrial
. Préstamos bancarios: este tipo de mecanismo de financiación a largo plazo suele emplearse para conseguir liquidez para financiar activos industriales. El préstamo puede ser a corto, medio o largo plazo, pero suele conllevar garantías y pagos de intereses. En este apartado se puede mencionar las líneas de crédito del Instituto de Crédito Oficial (ICO). El ICO es la institución pública que ofrece líneas de crédito especiales para financiar actividades empresariales y proyectos industriales. Además, el ICO canalizará 40.000 millones en préstamos a través de la colaboración público-privada para favorecer proyectos relacionados con la doble transición verde y digital de la economía.
. Sociedades de Garantía Recíproca (SGR): son una solución para empresas que no tienen suficientes avales para obtener financiación bancaria. Proporcionan la garantía necesaria, lo que permite a PYMES y a autónomos acceder a capital en condiciones más favorables, pudiendo obtener préstamos con intereses más bajos y plazos de devolución más amplios en comparación con los préstamos tradicionales.
. Leasing: un tipo de financiación que habilita la opción a compra tras finalizar un contrato de alquiler, que suele durar entre 2 y 10 años. Se utiliza para financiar maquinaria, vehículos industriales o inmuebles destinados a la actividad comercial o industrial.
. Subvenciones y ayudas públicas: tanto a nivel nacional como a nivel autonómico, hay numerosas subvenciones y ayudas específicas dirigidas a fomentar la inversión industrial y el desarrollo económico, conformando el tipo de financiación más interesante.
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