31 de July de 2024

“La economía aragonesa sigue sorprendiendo por su fortaleza”

Tanto el crecimiento español como el aragonés han sorprendido con tasas mayores que las previstas, alejando la recesión y quedando condicionados por el contexto global y la incertidumbre política

Los directivos aragoneses han mostrado su preocupación por “la distorsión del mercado de trabajo y la dificultad para cubrir determinados empleos, el desaprovechamiento del aumento de ingresos públicos derivados de la inflación para reducir el déficit, por parte de las AA. PP. y, por último, la difícil gobernabilidad de nuestro país, que complica abordar los problemas estructurales de nuestra economía”

Así lo reflejan los resultados del Indicador de Opinión ADEA del primer semestre de 2024 que se han presentado esta misma mañana


Zaragoza, 31 de julio de 2024

“La economía aragonesa sigue sorprendiendo por su fortaleza”. Es la conclusión principal que se desprende del Indicador de Opinión del primer semestre de 2024, presentado esta mañana en una rueda de prensa por el presidente de ADEA, Fernando Rodrigo, y la secretaria general, Diana Marchante.

El informe refleja que “se espera una buena evolución tanto de la economía española como de la aragonesa, quedando condicionada por el contexto global y la incertidumbre política”, ha explicado el presidente de ADEA. A medio plazo, según han trasladado los directivos, los grandes retos por abordar son tres: el primero, la distorsión del mercado de trabajo, “con más de 55.000 personas desempleadas, nuestras empresas no pueden cubrir los empleos que necesitan”. Por ello, han propuesto los directivos, “deben revisarse los subsidios de desempleo y el mecanismo del salario mínimo vital para ayudar a quien lo necesita sin desincentivar la búsqueda de empleo. También se deben afrontar los problemas estructurales del sistema educativo, como el elevado abandono escolar o la falta de población con formación secundaria superior o en materias de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas; y hay que plantear un debate serio sobre la inmigración, para garantizar la sostenibilidad del sistema por nosotros mismos”.

El segundo reto es “el desaprovechamiento de los aumentos de ingresos públicos derivados de la inflación para reducir el déficit por parte de las Administraciones Públicas siendo el tercer país europeo con mayor nivel de deuda solo detrás de Grecia e Italia y muy similar a Portugal y Francia”.

El último reto es la “difícil gobernabilidad de nuestro país que complica abordar los problemas estructurales de nuestra economía (productividad, educación, deuda pública) y entorpece la aprobación de presupuestos afectando a proyectos de los fondos NGEU”.

El Indicador de Opinión ADEA recoge las impresiones de los directivos aragoneses acerca de diferentes aspectos relacionados con la situación económica, como son la financiación, evolución de la plantilla, cifra de ventas y balanza comercial.

Los directivos aragoneses opinan que el acceso a la financiación se mantendrá igual en los próximos meses, con una tendencia a mejorar a final de año. “Después de 10 subidas consecutivas desde 2022, en junio de 2024 el BCE bajó 0,25 puntos los tipos de referencia dejándolos en el 4,25% porque la economía europea crece de manera débil y alienta las expectativas de desinflación”, ha explicado el presidente de ADEA, Fernando Rodrigo.

Sin embargo, “es prematuro hablar de nuevas rebajas hasta el otoño, ya que la inflación de la zona euro en junio de 2024 fue del 2,5%, lejos del 2%”. “España terminó 2023 con un IPC del 3,1% (subyacente 3,8%), por debajo del 5,7% de 2022 (subyacente 7%) y el último dato registrado en junio de 2024 ha sido del 3,4% (subyacente 3,0%). En Aragón, el IPC en 2023 fue del 2,5% (subyacente 3,8%), pero en junio de 2024, se aceleró a 3,5% (subyacente 3,0%), superando la media nacional”.

“Las previsiones de crecimiento económico a nivel internacional son mejores que a principios de año, especialmente en USA donde se estimaba una desaceleración desde el 2,5% en 2023 al 0,8% y ahora se cree que finalizará el año en el 2,4% por lo que no se espera que la FED baje tipos hasta finales de 2024, de modo que el BCE no siente la presión del dólar”. “También han mejorado ligeramente las expectativas de crecimiento en la UE (0,5% en 2023 y 0,8% en 2024) y la recesión se aleja, con poca prisa del BCE en bajar tipos”. No obstante, “el BCE se mantiene alerta ante los impactos de la inestabilidad geopolítica y la evolución del IPC en lo que queda de año, por lo que la desescalada de tipos de interés deberá de esperar”, ha afirmado Rodrigo.

Acerca del mercado de trabajo, los directivos aragoneses consideran que “sigue muy fuerte, pero preocupa la falta de mano de obra adecuada a los puestos vacantes a cubrir”. A pesar de momentos de incertidumbre, “el mercado laboral ha mantenido su fortaleza, contribuyendo a mantener vivo el consumo privado”. Según los últimos datos de la EPA, “Aragón tiene 55.800 desempleados (8,25%), mejor que la media nacional (11,27%) siendo la 4ª Comunidad Autónoma con la tasa más reducida tras Navarra, Baleares y País Vasco”. “Respecto al primer trimestre de 2024, ha aumentado el número de desempleados y de ocupados y esto se explica porque ha crecido la tasa de actividad y nuestro mercado laboral no ha podido absorber a todas las personas que se han incorporado”, ha detallado el presidente de ADEA.

“Pese a ser los mejores datos desde 2007, las principales preocupaciones de los directivos en el mercado de trabajo son: el desajuste entre oferta y demanda de empleo - 7 de cada 10 Pymes tienen dificultades para cubrir sus vacantes”. Por otro lado, “el riesgo de agotamiento del mercado laboral, con un perfil demográfico más envejecido que supone un factor limitante, teniendo que replantear las políticas de inmigración”. Y, en tercer lugar, “preocupa la pérdida de competitividad por la subida de los costes laborales y la caída de los niveles de inversión empresarial, pudiendo perjudicar a nuestra competitividad y creando una destrucción de empleo a medio plazo. A ello se une la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas”.

Acerca de la evolución general de la economía, “tanto el crecimiento español como el aragonés han sorprendido con tasas mayores que las previstas, alejando la recesión. En el primer semestre de 2024 se ha demostrado un dinamismo mayor al esperado a finales de 2023. Las tasas de crecimiento se han actualizado al alza, con el FMI y el Gobierno proyectando un crecimiento del 2,4% (2024), superior a las previsiones para la Eurozona del 0,9% (2024). En Aragón, se espera un crecimiento del 2,4% en 2024 (superando la estimación del 1,7% a final de 2023), frente al 2,0% en 2023”.

La demanda interna, han trasladado los directivos aragoneses, “ha contribuido modestamente al crecimiento, pero se espera que tome mayor protagonismo en meses venideros, gracias a una mejora del consumo privado que crece menos en Aragón (1,9%) que en España (2,5%) pero ofrece señales positivas debido a la mejora de indicadores coyunturales como el índice de comercio minorista o el empleo de tarjetas de crédito, la creación de empleo y el aumento de la renta bruta disponible de los hogares españoles o las actualizaciones salariales. Ante la previsible caída de los tipos de interés, se espera que parte de ese ahorro se transforme en consumo e impulse la demanda interna en la segunda parte del año”.

En cuanto al turismo, “ha registrado cifras récord en abril de 2024, con 7,8 millones de turistas y un gasto de 9.565 millones”. La inversión en vivienda también ha aumentado “debido al tirón de la demanda, favorecido por la robustez del mercado laboral, la bajada de tipos, el bajo nivel de deuda de las familias y la resiliencia de la demanda extranjera, aunque las restricciones de oferta por la disponibilidad de suelo y el encarecimiento de costes de construcción harán subir el precio de la vivienda”.

La inversión empresarial sigue siendo el componente del PIB con evolución más débil en los últimos años, “siendo que a nivel nacional aún se encuentra un 2,2% por debajo de los niveles prepandemia. En Aragón (-1,6%) bajó ligeramente menos que en España (-1,8%), si bien la buena noticia es que hay síntomas de reactivación e impulso con la bajada de tipos de interés y la llegada de los fondos NGEU, cuyo máximo gasto se espera en 2025”.

La contribución a la mejora del PIB del gasto público se ha reducido, “algo que tenemos que tomar como una buena noticia. En Aragón creció el 3,4% frente al 4,2% de España”.

El sector exterior registró buenos datos en 2023 pero ha mejorado en 2024 a pesar de la atonía de Europa, “con un crecimiento interanual del 7% en Aragón durante los cuatro primeros meses de 2024, algo muy remarcable porque en ese mismo periodo las exportaciones cayeron un 3,5% en España”. El protagonismo de las exportaciones corresponde al sector de automoción (+24,3%) seguido de agroalimentario (+12,6%) y materias primas (+8,3%). Por su parte, las importaciones aragonesas cayeron un -7,9% en términos interanuales en los primeros 4 meses de 2024, mucho mayor que el descenso que experimentaron en España (-2,0%).

Con el aumento de exportaciones y la caída de importaciones, la Balanza Comercial de Aragón ha registrado superávit, acumulando 198 millones de euros positivos en los primeros 4 meses de 2024, frente a un déficit de 653 millones en el mismo periodo de 2023. Con estos datos, “podemos afirmar que la industria aragonesa mantiene alta su competitividad pese a la atonía de la economía europea, la desglobalización y la incertidumbre de la geopolítica”, ha asegurado Rodrigo.

En definitiva, ha finalizado Fernando Rodrigo, “las perspectivas para la economía aragonesa en 2024 han mejorado respecto a las previsiones que había a principios de año, debido a que la economía mundial se desacelera menos de lo esperado, nuestro sector exterior sigue dando noticias positivas, el efecto positivo del dinamismo de la inmigración en el consumo y en el mercado de trabajo y los anuncios de grandes proyectos de inversión (renovables, centros datos, logística, agroalimentación), que generan expectativas positivas a medio plazo”.

Dicho barómetro, ha explicado Diana Marchante, “se obtiene a partir de una encuesta que recoge las impresiones de los directivos sobre diferentes aspectos relacionados con la situación económica y a la que, en esta ocasión, han respondido 251 directivos y ejecutivos de las áreas de dirección general, dirección comercial, dirección financiera, y de recursos humanos, de los sectores servicios, industrial, comercial y automoción de las empresas de la Comunidad”.